¿En qué momento se nos cayó la venda? ¿En qué momento nos dimos cuenta? ¿En qué momento vimos que la suerte estaba echada y ya no había marcha atrás? ¿En qué momento se desparramaron los sueños y comenzaron las decepciones? ¿En qué momento te despertaste y viste que ya no llegabas, que ibas a ser uno más? ¿En qué momento te descubriste en tu medianía, tu pequeñez, tu mediocridad? Y, ¿en qué momento empezaron la quejas y los lamentos porque la culpa no era tuya, que nunca ha sido tuya ni de los tuyos, sino de todos los demás? Que hasta alguna vez te has sorprendido a ti mismo con unas locas ganas de matar. ¡Metafóricamente, claro! Pero de matar. ¿En qué momento?