Confesiones de una adicta al arte

Las apasionantes memorias de una mujer icónica y visionaria, la gran coleccionista que marcó la historia del arte del siglo XX.

Nacida en una acomodada familia de Nueva York, Peggy Guggenheim decidió dejar su «ordinaria» vida y se marchó a Europa en 1921 en busca de aventura. Allí sembró las semillas de su trayectoria como una de las figuras más importantes del arte moderno, que catapultó a artistas como Brancusi, Cocteau o Kandinsky e inauguró las carreras de Jackson Pollock y Robert Motherwell, entre muchos otros. Sus apasionantes memorias constituyen un retrato del mundo del arte de los años treinta en adelante, de los entresijos del coleccionismo y de la historia social y política del siglo XX, así como un divertido recorrido por la disparatada vida de esta mujer, en el que no faltan sus romances y amistades con las personalidades más destacadas de la época.

La crítica ha dicho...
«Una de las mecenas más excéntricas y sofisticadas de los últimos cien años. […] La Peggy del arte, de los trajes, los amantes, las casas de lujo y las fotos y cuadros hechos por los punteros del momento.»

Karmentxu Marín, El País

«Si hay una persona que haya vivido de todo, esa ha sido Marguerite 'Peggy' Guggenheim.»

Vogue

«La mirada privilegiada de una mujer que vivió con intensidad.»

Telva, César Suárez

«Amantes del cotilleo y el arte, dejen las revistas en la mesa del café y abran ya Confesiones de una adicta al arte».
José Luis G. Gómez, La Opinión de Málaga

«Con un tono a menudo sarcástico, […] el valor de estas memorias no está en ser solo un testimonio del mundo del arte contemporáneo en esos años, sino que también recogen el impacto que tuvo ella y justifican una vida de pasión por el arte moderno, todo desde la mirada íntima de una de las figuras más influyentes del siglo XX.»

Sofía Giraldo, Madrid Actual

«Un raudal de mujeres tan enérgicas, expertas y dedicadas como Peggy Guggenheim es lo que necesita el mundo del arte. [...] A medio camino entre la avispada coleccionista y la verdadera amante del arte, Guggenheim nos ofrece un interesante registro del arte de los años veinte y treinta del siglo pasado.»
Kirkus

«Peggy no se conformó con ser una socialité más de su época. Rompió moldes, apoyó a artistas que cambiarían la historia del arte moderno y desafió las normas sociales de su tiempo.»

Preslava Boneva, The Objective

«Estas memorias[...] reflejan un mundo [...] perdido […]. Pero como la prosa de este libro es toda ella obra de Peggy, algo se ha salvado. Uno oye en estas líneas la voz enérgica y sin embargo pausada; ve la repentina y veloz mirada de soslayo que a menudo acompaña a sus veloces juicios; disfruta si no de su persona, al menos de su sombra sobre la página.»
Gore Vidal, prólogo

«Está claro que la señora Guggenheim es esa agradable combinación de astuta coleccionista y verdadera amante del arte, y su libro es un interesante registro del movimiento artístico de los años 20 y 30.»

Publishers Weekly

«Lectura obligatoria para todo aquel interesado por los artistas de primera línea, por este fructífero periodo de la historia del arte y por la mujer hecha a sí misma por excelencia.»

Waterstones

«En su estilo inimitable y atrevido, Peggy nos ofrece un vistazo al interior del mundo artístico con retratos íntimos, y a menudo sorprendentes, de sus protagonistas. Sinceras, ingeniosas y siempre divertidas, aquí tenemos unas memorias que capturan un valioso capítulo de la historia del arte moderno.»

Barnes & Noble