Los judeocristianos

testigos olvidados

Una aproximación al conocimiento de los “judeocristianos”. Ellos mismos jamás se llamaron así. Sus adversarios los llamaron en un sitio “ebionitas”, en otro “nazoreos”. De una manera u otra, continuaron observando en el oriente del Imperio romano los mandamientos de la Ley de Moisés, como buenos judíos que pretendían ser, y profesando su fe en Jesucristo, como herederos fieles de la comunidad-madre de Jerusalén. En el siglo V, cuando comenzaban a desaparecer, san Jerónimo los fulmina: no son “ni judíos ni cristianos”. ¿Qué eran entonces? A través de los testimonios patrísticos, he aquí una página olvidada de la historia de la Iglesia para releer el Nuevo Testamento.