Te querré toda la vida

José Luis ha cumplido ya los 33 años y por fin va a terminar Ingeniería Química. Para acabar su último curso, se cambia de ciudad y quiere que todo salga perfecto para así comenzar a trabajar el próximo año sin problemas. Lo que no sabe es que se quedará atrapado en un ascensor junto a una chica a la que no podrá ver la cara. La nerviosa conversación, a oscuras, termina desembocando en una noche desenfrenada, y al día siguiente ella ha desaparecido. Cuando todo parece indicar que quedará como una anécdota inaudita, la misteriosa chica se pone en contacto con José Luis y le vuelve a citar en varias ocasiones. Sin embargo, nunca permite que vea su rostro