TÉCNICAS AVANZADAS EN FISIOTERAPIA

Desde sus inicios, la fisioterapia ha experimentado un gran avance en métodos diagnósticos y terapéuticos propios o heredados de otras disciplinas. El desarrollo de la tecnología médica ha permitido derivar sus avances al campo de la fisioterapia, la cual mediante investigaciones propias las ha convertido en herramientas fiables para el diagnóstico y tratamiento de un gran abanico de patologías. Esto ha permitido incorporar a las técnicas tradicionales los últimos avances, desarrollar nuevas terapias de tratamiento, y descubrir nuevas aplicaciones terapéuticas destinadas originariamente al campo diagnóstico y médico. En esta guía se exponen algunos ejemplos de técnicas tradicionalmente destinadas al diagnóstico de enfermedades, que gracias al crecimiento de la fisioterapia basada en la evidencia, se les ha encontrado una aplicación terapéutica avanzada. Es el caso de la técnica ecográfica RUSI y la resonancia magnética terapéutica, técnicas usadas tradicionalmente de forma diagnóstica, a la que se les ha descubierto una finalidad curativa. Aparte, la electromiografía de superficie, la miotonometría y la tensiografía entre otras, han elevado el estándar del diagnóstico en fisioterapia a un nivel de certeza impensable hace años. Métodos no invasivos, indoloros y de fácil manejo que aportan una información fundamental para entender el normal funcionamiento del cuerpo humano y diferenciarlo de la disfunción desde una perspectiva más clara, precisa y resolutiva. Poder evaluar la fatiga muscular, conocer el número de unidades motoras que se activan en una contracción muscular, la rigidez, el tono y el tiempo que tarda un músculo en recuperar su forma inicial tras sufrir una deformación transversal, revelar asimetrías laterales y funcionales, el tipo de fibra predominante en un músculo o tener la capacidad de diagnosticar una lesión futura, son sólo algunos de los parámetros que hoy día están en manos de los fisioterapeutas y que forman parte de su práctica diaria.