Yo, Salvador Rueda. Confesiones de un viejo poeta

Yo Salvador Rueda, Confesiones de un viejo poeta, nos sumerge en sus recuerdos, en sus más hondas reflexiones sobre su vida y obra, en sus filias y fobias con los literatos de su generación. En un estilo tragicómico nos trasmite su lucha cuerpo a cuerpo en la arena literaria, con su arma más poderosa, la palabra: “Los poetas que no se ajustan para escribir versos a lo que impone rotundamente Dios y a lo que impone la sublime Madre Naturaleza no son, literariamente, hijos de la Gran Madre, sino solamente hijos de la Gran Puta”. En su regreso a Málaga presente en el relato, nos muestra su encendido amor por la ciudad y sus gentes, los amigos de toda la vida, Narciso Díaz Escovar, o el rapsoda González Marín. Descubrimos su pasión por el flamenco y de su mano recorremos La Caleta, con el cante de La Trini o Juan Breva, a quien lleva en el alma, que al igual que él nació bendecido en la Axarquía, la tierra más bella del mundo greco latino.